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A pesar del hecho evidente de que el deporte en general, y las FFS aún más, tienen numerosos beneficios y una amplia influencia positiva para todos los que participan en él, los resultados a nivel global no son tan alentadores como se esperaba.

De hecho, según la OMS, 1 de cada 4 adultos en el mundo no alcanza los niveles mundiales recomendados de actividad física. A pesar de que los datos científicos nos advierten de que las personas insuficientemente activas tienen un riesgo de muerte entre un 20 % y un 30 % mayor que las personas suficientemente activas, más del 80 % de la población adolescente mundial no es suficientemente activa físicamente.

¿Y los clubes y organizaciones deportivas? ¿Participan en sus programas habituales y, en caso afirmativo, con qué frecuencia? ¿Cuál es la reacción de sus grupos destinatarios en tales iniciativas: acogen y aprovechan tales oportunidades o siguen proyectando vacilaciones e indiferencia? ¿A qué tipo de retos se enfrentan por el camino y cuáles son los vacíos que aún deben cubrirse para que los SFS se conviertan en parte integrante de su trabajo?

En un esfuerzo por ofrecer una respuesta válida a estas preguntas, llevamos a cabo la “Investigación sobre las actividades adaptadas a las familias”, que incluía una encuesta cuantitativa en línea dirigida a clubes y organizaciones deportivas sin experiencia o con experiencia limitada en actividades adaptadas a las familias, así como a las partes interesadas pertinentes, y una fase cualitativa de entrevistas a representantes de clubes y organizaciones deportivas que se identificaban como practicantes de enfoques adaptados a las familias y, por tanto, con cierta experiencia, procedentes de cinco (4) países de Europa: España, Bélgica, Macedonia del Norte, Serbia y Grecia. Según los resultados de la investigación, los encuestados mostraron un gran interés por organizar y participar en más actividades respetuosas con la familia. Alrededor del 45% de ellos califican este interés con el grado más alto de la escala, mientras que el 48% muestra un interés entre moderado y alto.

Así pues, es obvio que la idea del SFF está aquí para quedarse y suponer un gran cambio en las vidas de todos los implicados. Veamos cómo podemos hacerlo realidad.