Capítulo 3

Flexibilidad, ajuste, adaptabilidad: conceptos bastante similares y definitivamente interrelacionados. Alguien que es flexible tiene la capacidad de adaptarse rápida y eficazmente a condiciones y entornos cambiantes, afrontar los retos que surgen con calma y estabilidad, tener opciones alternativas cuando las cosas no salen como se esperaba y también ser persistente ante las dificultades que surgen bruscamente. En cualquier entorno compartido con múltiples personas pueden surgir demandas impredecibles o acontecimientos inesperados. En tales ocasiones, ser versátil, resistente y receptivo al cambio – en otras palabras… ¡ser flexible es imprescindible! Pero esta es una cara de la moneda. Si le damos la vuelta, la flexibilidad también es importante para el equipo de FFS. Sus miembros deben ser capaces de adaptarse con rapidez y éxito a las nuevas circunstancias y a los cambios a corto plazo, y es -¡una vez más! – su papel fomentarlo. No se preocupe. Hay una forma de hacerlo: ¡échele un vistazo!